Este boletín incluye los acontecimientos ocurridos hasta el tercer trimestre de 2005 inclusive, por lo que se ha conseguido incluir un trimestre más de lo habitual, como consecuencia del adelanto de los trabajos de todo el circuito estadístico, tanto del INE como de este Instituto. De esta manera, los datos coyunturales que se publican a partir de ahora en los boletines trimestrales, se ajustan más al objetivo primordial de presentar la información provisional lo más cercano posible en el tiempo.

Con los datos definitivos de nacimientos de 2004, y los provisionales de los nueve primeros meses de 2005, se observa una moderación importante en el crecimiento del número de nacimientos. Los 1985 nacimientos más contabilizados en 2004 respecto a 2003, suponen un incremento del 3% en el número de nacimientos, pero es la mitad de lo que se creció un año antes (3891 casos en 2003 respecto a 2002, lo que supuso un 6,2% de incremento). Es el crecimiento más bajo de los últimos seis años, tanto en cifras absolutas como relativas. Los datos provisionales de 2005 apuntan en la misma dirección, mayor reducción en el crecimiento de los nacimientos, que puede situarlo para ese año en torno a los mil nacimientos más respecto a 2004, lo que supondría alrededor del 1,5% de crecimiento.

Las causas no sólo parecen debidas a la evolución de la estructura de edades de la población, puesto que tanto la tasa general de fecundidad como el índice sintético de fecundidad acompañan en la moderación del crecimiento en el último año definitivo y en los meses provisionales. La tasa general de fecundidad experimenta un crecimiento en 2004 de 0,57 puntos (1,35%), cuando lo hizo en 1,49 puntos (3,67%) en 2003. El índice sintético de fecundidad se sitúa en 2004 en 1,3278 hijos por mujer, un 1,24% más que en 2003, que a su vez fue un 3,04% más que en 2002. En los tres trimestres de 2005 no sólo se confirma esta tendencia a la moderación en el crecimiento, sino que incluso podría producirse un cambio de tendencia para el conjunto del año respecto a la observada en los últimos siete años.

Respecto a las defunciones de residentes en la Comunidad de Madrid, el año 2004 resultó ser un año fuera de la tendencia creciente en el número de defunciones. Los datos provisionales de 2005 vuelven a retomar esa tendencia al alza observada año tras año.

En cuanto a los indicadores principales de mortalidad, la tasa bruta vuelve a situarse para los tres primeros trimestres de 2005 en torno al 7 por mil y la tasa de mortalidad infantil por debajo del cuatro por mil. La edad media de la defunción sigue su línea ascendente para situarse en 71,94 años para hombres y 80,2 años para mujeres en 2004, lo que empuja la esperanza de vida al nacimiento hasta los 78,2 años para hombres y los 84,8 para mujeres en ese mismo año.

Como en años anteriores, los tumores y las enfermedades del sistema circulatorio acaparan alrededor del 29% de las defunciones cada una, es decir, casi tres de cada cinco defunciones de residentes registradas en la Comunidad de Madrid, tuvieron como motivo uno de estos dos tipos de enfermedad. Les siguen con un 13% de las causas las enfermedades del sistema respiratorio, y repartido de manera más residual el resto de las causas.

Con estos resultados, el crecimiento natural observado durante 2004 es definitivamente de 28.741 personas, poco más de tres mil personas más que el año anterior, y que se equipara a los niveles de crecimiento natural de hace veinte años.

Respecto a los matrimonios, observamos como sigue aumentando muy deprisa la edad media al matrimonio, tanto de hombres como de mujeres, situándose para 2004 en 32,77 años para esposos y 30,84 años para esposas, y en 31,51 años y 30,09 años respectivamente para los que acceden al matrimonio por primera vez (solteros). La diferencia entre el comportamiento del colectivo de extranjeros respecto al de españoles en cuanto a la edad al matrimonio no es muy significativo, puesto que en el caso de los esposos, los nacionales se casan un año después que los esposos extranjeros (32,87 frente a 31,87 años), y en el caso de las esposas son las extranjeras las que más tarde se casan con 30,98 años de media frente a los 30,82 años de las españolas.

Si atendemos a la nacionalidad de los contrayentes, con las cifras de 2004 se confirma la tendencia al aumento en los porcentajes de matrimonios en los que uno de los dos contrayentes es extranjero, que ocurre en casi uno de cada cinco matrimonios (19,1%). De todos los matrimonios celebrados en la Comunidad de Madrid que fijan su residencia en nuestra Comunidad, un 5,28% se celebró entre una española y un extranjero,  un 7,25% entre un español y una extranjera, y un 6,57% entre extranjeros, de los cuales un 5,31% corresponden a contrayentes de la misma nacionalidad, y un 1,26% entre personas extranjeras de nacionalidades distintas. En tan solo diez años, el peso de los matrimonios entre españoles se ha reducido en diez puntos y medio, del 91,54% en 1994 al 80,90% en 2004.

En los nueve primeros meses de 2005, se mantienen esas tendencias generales de matrimonios, aumento de la edad de los contrayentes, y aumento en el número de matrimonios mixtos en cuanto a la nacionalidad.